Seguramente alguna vez has escuchado que mezclar amor y negocios no es muy buena opción, lo cual, no necesariamente es verdad, ya que el éxito de un negocio dependerá siempre de cómo lo administren sus dueños y no de su parentesco.El simple hecho de emprender un negocio es un gran reto que genera miedo, y si tu idea es emprender junto a tu pareja, esto puede convertirse en un reto aún mayor, el cual pocos se atreven a intentar.